En la tarde del viernes 15 de abril un grupo de catequistas de las parroquias que conforman el "Arciprestazgo Centro" de la Diócesis de Valladolid se dieron cita en la parroquia de "San Nicolás" para valorar el trabajo realizado en las parroquias desde la publicación del Directorio diocesano de los sacramentos de la Iniciación cristiana. Concretamente se supervisaron los itinerarios que contienen los siguientes procesos catequéticos: Iniciación cristiana sin interrupción en el proceso (Eucaristía y Confirmación), Iniciación cristiana con interrupción (Confirmación), catequesis de confirmación de adultos (mayores de 21 años).
Comenzamos poniéndonos en la presencia de Dios y teniendo un ratito de oración. A continuación Javier Carlos nos presentó el trabajo a realizar, Juan Carlos se hizo presente y dio gracias a los catequistas por nuestra misión y nos alentó para continuar.
Después nos reunimos por grupos, según los itinerarios más arriba señalados. Después la puesta en común, en la que pudimos compartir lo que estamos haciendo en cada parroquia.
Somos conscientes de que la nueva situación de las familias, especialmente, nos urge una nueva evangelización en la que todos nosotros (sacerdotes y catequistas) tenemos que estar muy unidos. El Directorio pretende unificar criterios para remar en una misma dirección, para caminar en comunión.
Quedamos emplazados para una próxima reunión a principios de curso, donde pudiéramos seguir caminando juntos. Especialmente en situaciones muy particulares como son las de iniciar cristianamente a los niños sin bautizar en edad catequética, o iniciar cristianamente a los adultos sin bautizar a los que hay que animar a ingresar en el catecumenado bautismal diocesano.
Ojalá el resto de la diócesis pueda tomar nota de la reflexión que está haciendo este arciprestazgo con el Directorio diocesano de los sacramentos de la iniciación cristiana.
Quedamos emplazados para una próxima reunión a principios de curso, donde pudiéramos seguir caminando juntos. Especialmente en situaciones muy particulares como son las de iniciar cristianamente a los niños sin bautizar en edad catequética, o iniciar cristianamente a los adultos sin bautizar a los que hay que animar a ingresar en el catecumenado bautismal diocesano.
Ojalá el resto de la diócesis pueda tomar nota de la reflexión que está haciendo este arciprestazgo con el Directorio diocesano de los sacramentos de la iniciación cristiana.
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